¡Qué no se merecen las madres!
Tan "reventá" estaba la pobre madre después de unos meses de trabajo extenuante, que nos dijimos "Vamos a ver si descansa, por lo menos de la cocina, unas semanas". Y así nació lo que terminamos llamando COCINA COLABORATIVA.
Nos reunimos tres personas, una de cada familia, nos organizamos, diseñamos un menú para la semana, compramos y os lo podéis imaginar: la termomix echando humo, varios fuegos de la cocina funcionando, las tablas de cortar siempre ocupadas y el fregadero a tope. Resultado: quince tapex a repartir. Y todo sin discutir ¡INCREÍBLE!
Ensalada de pasta de Almansa. ENLACE a la entrada en este mismo blog.
Ensaladilla rusa.
Pimientos del piquillo rellenos.
Calamares en salsa
Solomillo frito con ajos.
Tendríamos que repetir
No hay comentarios:
Publicar un comentario