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domingo, 2 de septiembre de 2012

Rosco misterioso

El otro día fuí a un hipermercado con mis hijos y había un rosco de bizcocho de degustación y le di a probar al pequeño y no quiso. Me resultó extraño porque le gusta mucho  pero no le pregunté nada más. Volviendo  a casa  le hablé sobre el mismo tema y me dijo que no lo cogió porque pensaba que lo estaba robando. Así que como le apetecía este fue el resultado final de la historia:


Tuvimos que hacer uno. Estuvo rico rico y el niño pudo comer lo que le apeteció sobre todo porque le añadimos unas pepitas de chocolate.

2 comentarios:

  1. Una historia muy simpática, pero después de ver la altura del bizcocho, nos gustaría saber la receta

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  2. No me he enterado muy bien.
    Quieres decir que volvistes a robar otro bizcocho para comerlo en casa?

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